Hola,
Para mí es muy difícil hablarle a una cámara. No logro aún “ser yo” del todo cuando me filmo o me filman.
Estoy buscando un nombre para ponerle al sentimiento que uno experimenta al oír su voz grabada y darse cuenta que uno no habla como uno cree que uno habla. Es algo muy raro.
A veces experimento un poco de vergüenza al ver los videos. Uno se está exponiendo. Se está abriendo. Es vulnerable.
Esta semana el reto fue con esta pauta que vamos a poner para recordarles que Fuly Kids Immuny es el mejor complemento alimenticio para la temporada de vacaciones.
Pero, ¿saben qué he aprendido?… que no pasa nada. Que todo está bien. Quedan suficientemente buenos los videos. A algunas personas les gusta, a otras no. Pero no pasa nada.
Esos sentimientos negativos me los causé yo a mí mismo. Y me los seguiré causando, aunque ya en menor medida. Porque una cosa es identificar, articular y racionalizar lo que está en nuestro inconsciente, pero otra muy distinta es solucionarlo.
Pero volviendo al punto de nuestro email… el gran punto ciego que tenemos esta generación de padres es:
Nuestros hijos van a ser creadores de contenido (ni idea de qué tipo), y nosotros estamos dejando el ejemplo en manos de unos pocos. La mayoría de nosotros no estamos dando ningún ejemplo en absoluto, no estamos mostrándoles que se puede hacer contenido que no sean memes. No pasamos de subir fotos de una vida aparentemente perfecta y llena de momentos felices.
Las redes sociales ya no son para los amigos (para eso es WhatsApp)… son la plaza pública donde se están dando las conversaciones de toda una generación. Conversaciones que moldean su percepción de la realidad.
¿Quién está moldeando esa realidad?
El 90% del contenido es vacío, basura, calorías sin aporte nutricional. Y no tengo nada en contra de los memeros... de hecho, algunas veces los consumo y comparto. Pero no deberían ser el grueso del contenido que consuman nuestros hijos.
Yo ya empecé a poner mi granito de arena y a incomodarme poniendo contenido que de alguna manera espero sea buen ejemplo para Juan Pedro, mi hijo, en mis redes personales.
Probablemente cuando él esté en edad de verlo, dirá “que oso mi papá”, pero esa es la vida.
Necesitamos adultos en las redes sociales.
Estoy seguro que tú tienes algo para compartir que es valioso para el mundo y que va a ser un buen ejemplo para tus hijos de cómo relacionarse con las redes sociales.
Piénsale…. y comparte (de tu hobby, de tu trabajo, reflexiones, aprendizajes, etc) con el mundo. Tú sabes algo que es valioso para alguien.
“El ejemplo es una orden silenciosa”.
Hasta la próxima,
